El Tiempo en Cuenca

lunes, 12 de diciembre de 2011

Reflexionando sobre diversos aspectos y las pasadas elecciones generales

Mucho se habla estos meses de la crisis financiera, de la deuda soberana de los países, del déficit, de los recortes en los gastos sociales, en los salarios, de la pérdida  “necesaria” de derechos laborales, sanitarios, etc.; de minimizar las inversiones porque suponen más gastos, de los despilfarros cometidos por los gobiernos de las diferentes administraciones; pero, sin embargo, menos, apenas nada, de los gérmenes causantes de esta situación de crisis económica extremadamente complicada, en la que ya muchos expertos dudan de que exista algún camino por el que se pueda salir. Algunos economistas de las tertulias de radio y televisión, quizá para convencer y animar al votante de la necesidad de enormes sacrificios que impone el concepto  neoliberal hacia las clases medias y bajas, incluso califican esta situación de empobrecimiento colectivo como irreversible.

Es indignante la escasez de crítica verdadera que ha existido por parte de la mayoría de formaciones políticas, sobre todo las que conforman los partidos mayoritarios de España, respecto de las verdaderas causas que nos han conducido al problema, lo mismo que es a todas luces poco racional la política monetaria que se ha seguido, desde la instauración del euro, por parte de los estados miembros de la Unión Europea que adoptaron la nueva moneda y del Banco Central Europeo.  Se ha ido a contracorriente, según mi criterio, pues el dinero, que debería estar más caro en los tiempos de gran actividad y bonanza económica,  lo situaron casi a precio de saldo, una de las causas bajo mi humilde opinión de la descapitalización de los estados. Como si el dinero se tuviera que mover muy deprisa hacia determinados mercados, los más volátiles, favoreciendo que se sobredimensionaran enormemente los mismos, triplicando su  valor real y a su vez disparando la especulación hasta límites que nos situaron en una realidad ilusoria de potencialidad. Hasta que se pinchó la previsible burbuja inmobiliaria, el mercado de la construcción y la vivienda suponían casi la cuarta parte del producto interior bruto de España. Es decir, nuestro país sustentaba su economía, en gran parte, cimentada en una industria enormemente especuladora, que acaparaba gran parte del dinero manejado, pero con los pilares de barro. Además,  muy al contrario, no solamente no fueron previsores ni los gobernantes del gobierno saliente, ni los del gobierno anterior para evitar gran parte de los problemas que se podían avecinar, sino que además aprobaron leyes que ayudaban a inflar aún más la burbuja, favorecedoras en gran medida de la impunidad para buscar el dinero rápido que recaudaban las administraciones  del mercado de la construcción de viviendas.

Y, sorprendentemente, es ahora, en plena crisis, cuando el dinero lo sitúan a mayor interés, cuando se aplican los recortes, cuando se bajan los sueldos, cuando se deja de invertir, cuando, en definitiva, se fomenta una forma de actuar por parte de los mandatarios, que enfría más la economía y por tanto dificulta aún más el crecimiento de los mercados, lo que no solamente frena aún más la posibilidad de crecer y de empezar a salir de la crisis, sino que este nuevo enfriamiento, esta falta de liquidez debida también a una austeridad que podría ser excesiva, tanto como lo fue el despilfarro anterior, puede ocasionar de nuevo otra recesión.

Pero esto no se ha discutido, paradójicamente, en las pasadas elecciones del 22 de octubre, el debate ha girado principalmente, si bien con diferentes enfoques, hacia los excesos en los gastos de las arcas del Estado por parte del Gobierno saliente, lo que al Partido Popular, como la mayoría de partidos y analistas, ha calificado de derroche y despilfarro  de las arcas públicas. Da la sensación de que somos los ciudadanos de a pié, los trabajadores, jubilados y estudiantes, los gérmenes del problema para todos aquellos que no ven más salida que la aplicación de la que podríamos llamar como política neoliberal que poco a poco se ha ido imponiendo, y que ahora parece la única posible, ya que lo que se plantea como la única solución para atajar el problema, es frenar el déficit a costa de lo que sea, y por tanto disminuir en la mayor medida de lo posible la deuda para poder afrontar los pagos que genera. Nadie habla de que debemos producir más, de reconvertir las industrias y los mercados deficitarios, del reparto justo y necesario de los recursos, como el agua; ni de lo que sería la auténtica medida de ahorro para España, que no es otra más que generar mucha más energia propia y una buena planificación para disminuír lo máximo posible el consumo de las fuentes más dependientes.

Sin una austeridad extrema, sin recortes en todos los sectores, sin grandes sacrificios no hay solución y España está abocada a aumentar aún más el ya elevadísimo número de personas sin empleo, y por tanto la solución pasa necesariamente por llevar a cabo esa política de aminorar todo lo posible los gastos del Estado y del resto de las Administraciones, para generar confianza en los inversores y que nuestro país pueda cumplir sus compromisos, lo que a su vez da seguridad y a través de la inversión se genera empleo. Éste ha sido el eje principal del programa del Partido Popular.

Por el contrario, el Psoe, alejándose de la forma de actuar del propio Gobierno Socialista, que desde mayo del año pasado impuso grandes recortes en los salarios de los funcionarios, al igual que en las pensiones, con la congelación de las mismas, recortes en las dotaciones presupuestarias de todos los ministerios, así como el abandono de las inversiones en diferentes campos, como la investigación, las infraestructuras, etc, cambiando el rumbo en los discursos y programa electoral, basaba el fracaso de la incapacidad para la salida de la crisis, en esas políticas de austeridad excesiva. Prometiendo de nuevo subvenciones al empleo y presentándose como el aval para preservar los servicios públicos tal y como los conocemos en la actualidad.

Parece claro, con los resultados electorales en la mano, que se ha producido, más que un apoyo en masa al Partido ganador, el PP, la pérdida en muy grandes proporciones de la confianza que tenían en los socialistas muchos votantes de anteriores comicios, a los que claramente han culpado en gran parte de la crisis en España, de la descapitalización

Tampoco se ha hablado en las elecciones pasadas, o muy poco, de  La crisis energética, con la subida de los precios del petróleo, está poniendo a nuestro país en una situación mucho más delicada que la que padecen la mayoría de países de la Unión Europea.

Estaba claro que la falta de previsión del Gobierno socialista, como en gran parte del anterior popular, con una política en exceso despreocupada por la mayor dependencia de España con respecto al petróleo que muchas de las naciones europeas, tarde o temprano tenía que traernos malas consecuencias.

España es uno de los países donde existe menor producción de energía eléctrica a través de centrales nucleares; es conveniente, evidentemente, que se desarrolle un programa de energías alternativas, como la eólica o la solar, pero está claro que tanto en cuanto éstas se encuentran aún en un estado insuficiente de desarrollo, tanto a nivel tecnológico, como cuantitativo con respecto de todos los elementos necesarios, la política de desmantelamiento de centrales nucleares que han practicado los gobiernos ante la presión de los movimientos ecologistas, ahora se demuestra precipitada.

Por otra parte, el abandono del Ferrocarril, y la falta de inversiones para adecuar la red existente y crear nuevas vías acordes a las nuevas demandas, ha hecho que todos los sectores se vean necesariamente vinculados en exceso al transporte por carretera. Está claro que los primeros gastos necesarios para la creación de un sistema de ferrocarriles adecuado, así como la modernización y el mantenimiento del ya existente, es elevado; pero sin embargo, es uno de los más rentables a medio y largo plazo de cuantos se hacen en infraestructuras.

No se puede culpar exclusivamente de la subida de los precios al elevado coste del petróleo, para explicar la mayor crisis que está atravesando España, pues mientras aquí el índice de Precios al Consumo supera el 3%, la media de la Unión Europea está aproximadamente a la mitad, y una de las repercusiones más directas de esta carestía incontrolada es, sin ninguna duda, el desempleo, y de ahí los riesgos sobre el sistema que garantiza las prestaciones sociales. Se desequilibra la balanza de los ingresos respecto a los gastos, y aparece el déficit, con lo que el Estado deja de crecer y recurre de nuevo a los créditos que nos llevan al aumento de la carga impositiva y a la temida deuda. Debemos recordar que en los años 80 la deuda llegó a superar el 22% del PIB, lo que motivó el recorte de algunas de las prestaciones -subsidio por desempleo, algunos medicamentos, entre otras- que llegaron incluso a hacer temer a medio plazo por las pensiones.

España ha pasado en tan solo dos años de ser el mayor generador de empleo, a creador de paro hasta niveles insoportables, más de 5 millones. La economía española, que hace poco parecía boyante, se basaba en gran medida en un sector que realmente no es productivo, en concreto en torno al 24% del Producto Interior Bruto, del que la mayor parte ha estado acaparado por la construcción de viviendas que, en estos últimos años, se vio impulsado de una forma desmedida por la bajada del precio del dinero, sin que ninguno de los gobiernos establecieran ninguna solución para frenar los excesos inflacionistas de un sector que no se resigna a practicar las leyes del mercado, interviniendo permanentemente sobre las mismas mediante la especulación sobre el suelo, y especulando una vez más sobre la oferta y la demanda. 

Ahora, la subida del euribor, y por tanto la enorme carga de las hipotecas, demuestra no solamente la vulnerabilidad del mercado de la vivienda, sino también ha puesto al descubierto la gran burbuja económica que se fue originando fruto de la enorme estafa inmobiliaria. 

Estos días los españoles estamos sufriendo con alarma las consecuencias de una política de bajas miras, en la que los sucesivos gobiernos, y sobre todo el actual, se habían acomodado a una situación de pujanza, sin prever ninguna adversidad, por otra parte lógica, ni a medio ni a largo plazo. 

Un Gobierno tiene que ver que las mejores medidas para frenar las crisis son sin duda las que se adoptan antes de padecerlas, pues la intervención directa, una vez que aparece, además de ser difícil de aplicar, porque conlleva elementos de impopularidad, suele ser poco efectiva y, se debe entender que estas medidas pasan a la fuerza por invertir en infraestructuras para la obtención de energía menos dependiente del petróleo, y por supuesto en vías de comunicación como el Ferrocarril. El gobierno tiene que utilizar los recursos del Estado para frenar la inflación, y éstos no siempre son económicos. Por ejemplo, la agilización de la Justicia y la aplicación estricta de las leyes para impedir las ilegalidades que se producen en los precios, donde la competencia ilegítima es uno de los mayores motores para el alza.

El Gobierno, pienso, que lo que debe hacer es garantizar que funcionan las herramientas del Estado e impedir cualquier clase de especulación, pero eso nos lleva necesariamente a intervenir en un sistema judicial caduco y, por tanto, poco operativo para prevenir la ilegalidad, y a legislar mejor sobre el funcionamiento del mercado.

Tampoco se puede entender que el reajuste que supuso la entrada de España en el Mercado Común Europeo, se derivara casi exclusivamente hacia la política de subvenciones, y no fundamentalmente a inversiones para la transformación de las industrias de los diferentes sectores, sobre todo del primario, que apenas se han reciclado, para que las actividades sean realmente competitivas. Ningún gobierno ha sido capaz, por ejemplo, de sacar adelante un plan hidrológico que solucione definitivamente las necesidades y descompensaciones que existen con el reparto del agua.

En la segunda mitad de la década de los 80, y parte de los 90, el Gobierno de Felipe González intentaba solapar la crisis, y la elevada tasa de desempleo, mediante los diferentes planes de infraestructuras, que afectaron a la modernización de la red de carreteras del Estado, construyéndose las autovías de 1ª generación, y la primera línea de Alta Velocidad.



Otro de los aspectos que se debe criticar, y que debería estar ya resuelto, pues produce una situación de injusticia, de desigualdad en la representación de los españoles en las Cortes, así como  la potenciación del nacionalismo, es sin duda la Ley Electoral que rige, que se basa en el sistema de repartos que establece la Ley D´Hondt y fijar como circunscripción cada una de las provincias. De un lado, el método que fijó D´Hondt para repartir los escaños, favorece a los partidos mayoritarios, de otro, que las circunscripciones sean de ámbito provincial, favorece a los partidos más localistas, que abaratan así mucho sus escaños.
Así, en las pasadas elecciones generales, los resultados fueron los siguientes:

PNV
323.517
5
6
ERC
256.393
3
3
BNG
183.279
2
2
CC-NC-PNC
143.550
2
2
COMPROMÍS-Q
125.150
1
FAC
99.173
1
GBAI
42.411
1
EQUO
215.776
0
PACMA
101.557
0
0
Eb
97.706
0
PA
76.852
0
PxC
59.781
0
P.R.C.
43.903


El injusto reparto de escaños regido por la Constitución Española y la Ley Electoral (LOREG), permite que partidos con más votos tengan menos representantes en el Congreso de los Diputados que otros partidos con menos votos:
  • UPyD, obteniendo 834.000 votos más que en las pasadas elecciones, ha ganado 4 diputados respecto a 2008. El PP, con 552.000 votos más que en las pasadas elecciones obtendrá 32 diputados más.
  • A algunos partidos les saldrá el escaño muy económico: A GBai le saldrá el diputado a 42.412 votos, a AMAIUR a 47.661 votos, al PP a 58.229 votos, al PSOE a 63.399 votos y a CIU a 63.391.
  • A otros les saldrá el escaño muy caro: A Compromís le saldrá el diputado a 125.150, a IU a 152.800 votos, a UPyD a 228.048 votos. EQUO, habiendo obtenido 215.776 votos, no tendrá representación.
Con estos datos, podemos ver que algo falla. Muchos echan erróneamente la culpa al reparto mediante la Ley D’Hondt, pero en realidad el principal problema está en las circunscripciones. La circunscripción electoral en las elecciones españolas es la provincia, tal y como está descrito en el artículo 68 de la Constitución e incorporado a la Ley Electoral (LOREG).

A causa de ser unas circunscripciones pequeñas, multitud de votos se pierden debido a que muchos partidos minoritarios no llegan al mínimo para conseguir representación en determinadas provincias. Cambiar esto de forma radical a una circunscripción única sería un gran problema, ya que se perdería el peso territorial que siempre ha estado presente en las elecciones españolas.

Pero si símplemente aumentásemos las circunscripciones al tamaño de autonomías, el cambio en el reparto de escaños con los mismos resultados sería asombroso. Tanto, que el PP no habría obtenido la mayoría absoluta, perdiendo 12 escaños:
  • Partido Político: Antes –> Después
  • PP: 186 –> 174
  • PSOE: 110 –> 108
  • IU: 11 –> 19
  • CIU: 16 –> 15
  • UPyD: 5 –> 12
  • PNV: 5 –> 6
  • AMAIUR: 7 –> 6
  • ERC: 3 –> 3
  • CC: 2 –> 2
  • BNG: 2 –> 2
  • GBAI: 1 –> 1
  • FAC: 1 –> 1
  • Compromis: 1 –> 1

Este cambio mantendría las influencias regionales, pero además haría el reparto global de escaños fuera algo más justo, asemejándose más el precio que le cuesta a cada partido un diputado.

Por supuesto, esto no sería nada más que una propuesta inicial para empezar a cambiar las cosas. He elegido como circunscripciones las autonomías porque ya son divisiones establecidas desde hace varias décadas y han funcionado bien en muchos aspectos. Pero se podría negociar la creación de otras circunscripciones nuevas, o incluso unir algunas autonomías más pequeñas a otras más grandes para crear la circunscripción (pensando sobretodo en Navarra, Ceuta, Melilla, Cantabria o La Rioja).

También se podría añadir un cambio en la asignación de escaños por Comunidad Autónoma, ya que haciéndolo de forma directa posiblemente quedasen los niveles de población y escaños algo descompensados. E incluso se podría incluir una circunscripción extra global en la que asignar escaños con los restos obtenidos en los repartos en las distintas circunscripciones, para solventar así el caso de partidos como EQUO, con mcuhos votantes, pero muy repartidos por todo el territorio nacional.

Los cambios habría que meditarlos profundamente, pero está claro que algo necesita cambiar.

miércoles, 6 de abril de 2011

Collada se reúne con el Pleno de la Ejecutiva de la Patronal


José Luís Collada, candidato a la Alcaldía de Cuenca por UPyD, y el número dos de la lista de esta formación política a la institución Municipal, Antonio Ortiz, se han reunido con la Ejecutiva Provincial de la Confederación de Empresarios de Cuenca (CEOE-CEPYME), encabezada por su presidente Abrahán Sarrión y la asistencia plenaria de la Ejecutiva de la Patronal Conquense, entre otros el Secretario General de la Organización, Ángel Mayordomo.


El encuentro, que se ha desarrollado de forma muy cordial, ha servido para poner de manifiesto las inquietudes de los empresarios de Cuenca y las posibles soluciones que UPyD pueda aportar a las mismas.


José Luís Collada, expuso algunas de las medidas de inversión que UPyD llevará a cabo durante la legislatura que comenzará el próximo 23 de mayo, si los conquenses deciden que la candidatura que encabeza tenga responsabilidades de Gobierno, en solitario, o como una tercera fuerza política, con verdadero compromiso de gestión eficaz, limpia y transparente. 


Especial hincapié ha hecho en determinadas obras de infraestructuras que UPyD considera necesarias para modernizar de una vez por todas Cuenca, ya que según explicó el Candidato en nuestra ciudad y provincia sigue existiendo todavía temor a realizar inversiones importantes y de gran envergadura, que aunque complejas de ejecución son necesarias para el progreso.


Estas inversiones, que de ninguna manera deben considerarse gastos, según José Luís Collada, son las que harán que Cuenca pueda en un futuro próximo coger a tiempo el tren de la recuperación económica. Según el Candidato de UPyD, es necesario llevar a cabo un replanteamiento urbanístico completo del centro urbano, de manera que fomente el uso residencial y la actividad económica, y que afectaría al embellecimiento de la zona y la ejecución de calles y plazas nuevas y de nuevos ejes perimetrales y radiales para el tráfico, uno de los cuales será el soterramiento de una vía para el tráfico en carretería, para hacer viable la peatonalización plena, y se aumentará de forma decisiva las plazas de aparcamiento para residentes y visitantes, con la ampliación del actual parking de la Plaza de España, hasta las 450 plazas y creando uno nuevo en la zona de la Plaza la Hispanidad, de menor capacidad; siempre buscando la inversión privada tan necesaria para autofinanciar obras de este calibre, ya que va a existir la posibilidad de contar con una de las mejores ocasiones como son los inmuebles que se quedarán en desuso; por ejemplo el solar que dejará el edificio de la actual sede de la organización empresarial y de los sindicatos, con la participación de los ciudadanos, ya que UPyD dará establecerá el 30 por ciento como cuota de participación en los jurados que se establezcan, para todos aquellos proyectos de relevancia que afecten al paisaje urbano y al patrimonio, evitando así además cualquier destino distinto que no repercuta en el beneficio neto de Cuenca y los conquenses.


Por otra parte, se ha establecido como prioritario también la construcción de la Estación Intermodal, para todos los servicios de transporte urbano e interurbano de viajeros, en los actuales terrenos de ADIF, para dar sentido y poder aprovechar la mala ubicación de la mal llamada “Estació”, Fernando Zóbel, ya que en las condiciones actuales quedará, como tantos nos temíamos, en lo que ya se ha demostrado estos meses que es simple apeadero.


Collada ha explicado la necesidad de establecer una conexión adecuada entre la futura Estación Central Intermodal de Cuenca y la Fernando Zóbel, de manera que aparte de un boulevard para el tráfico de coches, se llevará a cabo la infraestructura que requiere una lanzadera que unirá en menos de 5 minutos ambas estaciones. De igual manera ha enfatizado en la importancia del Ferrocarril Convencional, para lo que se ha comprometido a fomentar un Consorcio de Ayuntamientos, con cabida tanto a otras instituciones, como la Junta de Castilla la Mancha y la Diputación Provincial, así como asociaciones empresariales y la iniciativa privada. En este sentido, ha abogado por proponer a Renfe la inclusión, a través del Consorcio que se creará, del biodiesel como combustible que usen las locomotoras que circulen por nuestra línea, con fuerte implantación productiva en la provincia, estando además la materia prima está garantizada.


Ambas partes han coincidido en la extrema dificultad de los siguientes cuatro años para efectuar tales inversiones, a lo que UPyD en boca de sus representantes mantiene que con inversiones que se basen en el sentido común y en la lógica empresarial, éstas dejan de ser meros gastos, sirviendo verdaderamente para crear progreso, que a corto y medio plazo pueden generar la rentabilidad necesaria y por tanto la potenciación de la actividad económica de las actuales empresas, y además la implantación de otras nuevas y por tanto el crecimiento del empleo.


Los empresarios han mostrado su mayor preocupación en la dimensión del endeudamiento que tiene el Ayuntamiento de Cuenca, que ronda los 50 millones y que ha llevado al Consistorio al impago de miles de facturas y al cierre de empresas y comercios, al mayor incremento de las cifras de desempleo, así como a la enorme dificultad de muchos para mantener sus negocios. Collada ha culpado como causantes principales de esta situación tan precaria, a los alcaldes y equipos de Gobierno que ha habido hasta ahora, ya que sus políticas se han basado en el despilfarro, la mala gestión en las finanzas y presupuestos, y el el excesivo gasto realizado, gasto que según UPyD no se ha visto reflejado en inversiones importantes, ni proyectos de desarrollo, ni mejoras para los ciudadanos.


Por ello UPyD ha trasladado a la Ejecutiva Provincial de CEOE-CEPYME, la necesidad de revisar todos y cada unos de los servicios municipales, así como la catalogación de los puestos de trabajo, de cara a establecer una jerarquía de necesidades y prioridades, cambiando lo que no funciona bien, desechando lo que no funciona, estableciendo la coherencia necesaria para la profesionalización de los empleados públicos y desechando por completo los gastos innecesarios.


Ambas partes han coincidido en que son excesivas y desmesuradas las gastos municipales, sobre todo en los gastos denominados corrientes, lo que lógicamente conduce al impago y los niveles tan enormes de deuda y la destrucción de empresas y empleo.


Otros de los aspectos relevantes ha sido el de la fiscalidad, pues Abraham Sarrión se ha dirigido a Collada para pedirle que la política de impuestos por parte de la formación que lidera, sea acorde con las necesidades de los empresarios para facilitar la viabilidad de sus actividades, y de esa forma frenar la destrucción de empleo y posibilitar la generación de puestos de trabajo. El candidato ha comentado que favorecer la actividad empresarial y el fomento del empleo es el punto más importante de su programa y el pilar de las políticas que llevarán al Ayuntamiento, ya que consistirán en medidas urbanísticas para facilitar el suelo industrial, así como la inversión directa del Municipio en subvenciones que incentiven y faciliten la contratación. También se ha comprometido a llevar a cabo una reforma importante de la política de recaudación, reestructurando no solamente las fórmulas a aplicar, sino además la propia concepción de la fiscalidad. Se dejarán de cobrar tasas obsoletas, y se modificarán impuestos importantes, ajustándolos a una política de inversiones y de austeridad máxima en los gastos.


Por último, el presidente de CEOE-CEPYME, Abraham Sarrión, ha ofrecido su apoyo y el de la organización empresarial, en los proyectos que la candidatura de UPyD le ha presentado durante la reunión.

miércoles, 15 de diciembre de 2010

Es bueno refrescar la memoria: La verdadera historia del AVE por Cuenca, por José Luis Collada en la WEB de iXC (5 octubre 2006)

AVE POR CUENCA HISTORIA DE UN ACUERDO

Bono, desde que el Gobierno de Felipe González incluyó en el PDI (Plan Director de Infraestructuras del Estado 1992-2007) el AVE Madrid-Valencia por Alcázar de S. Juan y Albacete, a propuesta del entonces ministro de Obras Públicas y Urbanismo Josep Borrell, se volcó por ese corredor, aun a pesar de que sólo favorecía a dos poblaciones manchegas y excluyendo a Cuenca, que quedaba muy alejada del trazado.

Cuando el diputado nacional por la provincia de Cuenca, José Madero, en un impulso insólito de valentía se atrevió a preguntarle en el Congreso sobre la posición del Gobierno de España para el trazado del AVE, y la no inclusión en el borrador del documento definitivo del PDI de la ciudad de Cuenca; éste, el ministro catalán que antes había sido secretario de Estado de Hacienda, le contestó que el Gobierno no estaba para realizar obras faraónicas entre cordilleras insalvables.

Sin embargo, Bono que era tan presidente de esta autonomía con Borrell como lo fue después en el momento de decidirse el trazado definitivo bajo el ministerio de Álvarez Cascos, no dijo "ni pío". Como pasaba por Albacete...

Bono mantuvo esa misma postura, es decir, el trazado del AVE por Alcázar de S. Juan y Albacete, hasta que el Martes Santo del año 1999 una comisión de la Plataforma Cívica por Cuenca, le presentó el trazado del AVE que antes había entregado a Ferreros y Cenzano sin que fueran capaces -seguramente por falta de fe-, de llevarlo más allá de las fronteras conquenses, y quedando aparcado en un cajón del Ayuntamiento de Cuenca.

Aquellos miembros de la Plataforma -Constan, Melli y Tribes-, aquel Martes Santo pudieron convencer a Bono para que defendiera el trazado de Cuenca. Y no lo consiguieron por las bondades del mismo -ni por ser el trazado más lógico, ni por incluir a Cuenca, ni por ser el rectilíneo-, sino porque le demostraron, con un mapa en la mano, que para nada iba a perjudicar los intereses de Albacete, como él decía. Si nos fijamos en las distancias entre Madrid y Albacete, por Alcázar o por Cuenca, la diferencia solamente son 17 km según el estudio informativo oficial del Ministerio de Fomento, que en velocidades de trenes AVE, se convierten en unos escasos tres minutos -comparados los trazados norte y sur sobre el mapa, con referencias en Madrid, Cuenca, Albacete o Madrid, Alcázar de S. Juan, Albacete, formaban un rombo casi perfecto-, que en el cómputo total entre Madrid y Valencia, no sólo desaparecen, sino que éstos son mucho menores por Cuenca. En ese momento se le dijo que tenía la oportunidad histórica de ser el primer presidente de una autonomía que uniera por AVE todas las capitales de provincia, e incluso de llamar esa opción de trazado como AVE integral por ese mismo motivo. La trampa estaba, como ya sabía la propia Plataforma, en llamar ramal al directo Motilla-Valencia, porque con el tiempo dado la golosina que se le presentaba al empresariado valenciano, por primera vez, y la segura presión que ejercería, sería el primero en hacerse como el auténtico AVE Madrid-Valencia.

Bono cayó en la trampa aquel Martes Santo, y por primera vez se enfrentaría a una parte importante de la sociedad albaceteña por defender algo que a quien realmente beneficiaría sería a Cuenca.

Un domingo de la primavera del 99 por la mañana, algunos miembros de la Plataforma, entre los que se encontraban Melli, José Tribes, Manolo Calatayud "el dentista", y un servidor, José Luis Collada, mantuvimos una reunión facilitada por el ilustre científico valenciano, tan querido y vinculado a Cuenca, Santiago Grisolía, con destacados empresarios de la Fundación de Estudios Avanzados de Valencia, como el portentoso y potente empresario de la porcelana, José Lladró, celebrada en nuestra propia ciudad, de la cual salieron plenamente convencidos de la conveniencia y la necesidad de la defensa del trazado norte por Cuenca.

A partir de entonces, José Bono sería el señuelo para paralizar las intenciones del Gobierno minoritario de José Maria Aznar, que como todos los gobiernos que necesitaban del nacionalismo, se encontraba en parte secuestrado por los intereses catalanistas, y con un Ministerio de Fomento que, administrado por Rafael Arias Salgado, estaba perfectamente en manos de CIU que lo comisionaba a través de hombres como Albert Villalta o Manuel Niño (eterno enemigo de Cuenca, tanto en la época de la Autovía pasando después por el AVE, e incluso ahora con la Estación) en ese momento en la secretaría de Estado de Fomento, y anteriormente Conseller de la Generalitat Catalana.

Se trataba, por tanto, de usar a Bono como coartada para hacer valer ante el empresariado alicantino coincidente hasta ese momento con la opción del Gobierno -en una reunión de la Plataforma en la sede de COEPA, en la que se encontraba el entonces presidente del empresariado Joaquín Rocamora, y el director general de ENDESA (Observador Mediterráneo), Rafael Miranda y Rafael Ferrando, de la Cierval- aquello de AVE que no para no pasa y que empezó a decir Bono por todas partes y, de paso, impulsar en la sociedad valenciana un movimiento reivindicativo con pocos precedentes, estimulando y convenciendo no solamente al empresariado, que como sucedió con la Autovía, se conformaban con disponer del AVE, aunque fuera el peor de los posibles, sino también creando y fortaleciendo la opinión favorable hacia el trazado de Cuenca en otros sectores influyentes, como profesionales de amplio reconocimiento en la ingeniería, la arquitectura y, en general, la cultura y las ciencias.

Con el borrador de trazado elaborado por el ingeniero conquense Ángel Pérez, basado en el original que había elaborado Tribes,  y un documento de la Plataforma con cien razones que fundamentaban el trazado norte por Cuenca, se habló con Gómez Perreta -padre e hijo-, que hasta ese momento habían estado posicionados por la opción centro y los cuales formaron el conocido por ese motivo "Foro cívico de Valencia” con el que después fueron unos de los mayores emprendedores para conseguir el trazado por Cuenca -recordemos que Gómez Perreta fue el ingeniero de caminos que ideó la solución y diseñó el paso de la A-3 por Contreras-; con Federico Félix y la asociación de empresarios "AVE", con el presidente de la Cámara de Comercio valenciana, Arturo Virosque; el director del Instituto de Robótica de la Universidad de Valencia, Gregorio Martín; etc. Los cuales empiezan a realizar actos y conferencias, e incluso elaboran importantísimos documentos en los que defienden con fuerza el AVE directo por Cuenca.

Por otra parte y para complicarle más la cuestión al ministerio de Arias Salgado, que llevado de la mano de Albert Villarta y el interés del nacionalismo, pretendía decidir el trazado por Alcázar y Albacete para lo que sería un falso AVE en forma de Alaris reestructurado y modernizado por un viario mejorado, se mantuvo una reunión con el presidente de la Cámara de Comercio de Castellón, que tras conocer el trazado que se le presentó, claramente se dio cuenta de que era su opción a partir de ese momento. Hasta entonces se decantaba por defender el corredor mediterráneo, sin más, y a Madrid por Valencia y Albacete, porque lo de Cuenca lo creía inviable.

También, la Plataforma mantuvo reuniones en Madrid, de la que se destaca la llevada cabo con el Presidente de la Cámara de Comercio de Madrid, Juan Luis Mato, que tras convencerse se erigió en claro defensor del trazado por Cuenca, incluso llegando a tratarlo por teléfono "in situ" con el propio ministro.

Así las cosas, y como lo que interesaba era frenar las intenciones de Arias Salgado y CIU hasta esperar tiempos electorales mejores y que el Gobierno se liberara del nacionalismo, se inició una campaña de "spot publicitarios" en las emisoras de radio y prensa más importantes de las comunidades de Madrid y Valencia. Se establecieron contactos con periodistas de relevancia en la Comunidad Valenciana, como María Consuelo Reyna, que era la directora del diario "Las Provincias", una de las cabeceras con más tirada alli y que desde entonces día sí y día también editaba artículos y reportajes cargados de argumentos defendiendo el trazado por Cuenca -probablemente algo tuvo que ver aquello  en su destitución al frente del diario-, con Vicente Aupí, destacado redactor de "El Levante" y de fuerte trascendencia en la defensa de nuestro AVE. También se hizo campaña en Madrid; por ejemplo, ABC publicó a toda página, en la primera, un reportaje de la Plataforma Cívica y la defensa del AVE por Cuenca, redactado por Marta Torquemada

En noviembre del 99 se produce la cumbre ministro Arias Salgado, y los presidentes de las cuatro autonomías Madrid, Valencia, Castilla la Mancha y Murcia. Pero en ese momento, la Plataforma ya había conseguido su primer gran objetivo. Bono logra que el trazado por Cuenca se incluya en el Estudio Informativo que saldría a Exposición Publica en el BOE del 16 de diciembre del 99.

Recuerdo como anécdota de aquella época, una reunión con el Consejero ya fallecido de Infraestructuras de la Generalidad Valenciana,José Ramón García Antón, en la que estuvimos presente por parte de la Plataforma solamente Tribes y yo mismo, que llamó la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, para preguntarle al consejero por el rumbo que llevaba la reunión, a lo que le contestó, "enhorabuena Rita, porque estos chicos de Cuenca van a conseguir que el AVE vaya por donde tú quieres". Después hablamos de los beneficios del Ferrocarril Convencional por Cuenca y la necesidad de trabajar por la modernización del mismo y la importancia para las mercancías.

Se había dado el primer gran paso. Ahora sólo quedaba movilizar a los conquenses para afrontar el periodo de alegaciones.

Por ese motivo, para implicar a los ciudadanos, se convocaron dos manifestaciones,una en Valencia y otra en Madrid y se prepararon quince alegaciones al Estudio Informativo -el encargado fue Antonio Melero- basadas en el documento primero de las cien razones, que fueron rubricadas por más de 15 mil conquenses residentes en nuestra ciudad; y muchos otros que lo hacen en Madrid, Alicante, Valencia y Barcelona, principalmente en las "Casas de Cuenca" de aquellas ciudades, hasta donde se trasladaron para llevarlas y presentarlas Constancio Aguirre y Amador Cruz. En total el Ministerio de Fomento recibió más de 66 mil alegaciones, que pararon por completo un proceso que nos conducía de forma irremediable, tan solo unos meses atrás, a repetir la historia de la Autovía y a una decisión que hubiera dejado de nuevo a Cuenca fuera de cualquier posibilidad de desarrollo.

Tras las elecciones de 2000, Aznar consiguió la mayoría en el Congreso y la libertad para decidir con justicia y con razón.

En junio del año 2000, pocos meses después de renovar Aznar el cargo como presidente del Gobierno y relevado del puesto Rafael Arias Salgado; ya con el Ministerio de Fomento en manos del ingeniero de caminos Francisco Álvarez Cascos, se produce un acontecimiento en el Congreso que define de forma absoluta la decisión, que unos meses después iba a cambiar el destino de los conquenses hacia un nuevo rumbo de esperanza. Álvarez Cascos anuncia ante la Comisión de Infraestructuras del Congreso de los Diputados la nueva postura del Gobierno con respecto al trazado del AVE Madrid-Levante. El Ministerio de Fomento presentaba el trazado A modificado, que era el AVE por Cuenca. "Nunca en la historia de la Administración Española había existido un proceso administrativo como en la defensa del AVE por Cuenca, en el que los ciudadanos habían presentado decenas de miles de alegaciones", reconoció el propio Ministro en su comparecencia ante los Diputados.

El 8 de enero del año 2001, reunidos en Murcia el Ministro y los cuatro presidentes autonómicos, acuerdan el trazado presentado por el Gobierno. Cuenca definitivamente conseguía el AVE por el que tanto se había luchado.


José Luis Collada Castreño

Memoria del AVE a Albacete y Valencia

                                         
Francisco Álvarez Cascos, Exministro de Fomento



ABC.- Francisco Álvarez Cascos. 14/12/2010

El 2 de octubre de 2002 en Picassent, bajo los buenos augurios de una fina lluvia, el presidente del Gobierno presidió el acto oficial de colocación de la primera traviesa en el corredor de alta velocidad Madrid-Castilla La Mancha-Comunidad Valenciana-Murcia. Sucede que las obras de las grandes infraestructuras de transporte se pueden paralizar o retrasar, pero no se pueden trasladar a otro lugar como podría ocurrir con una fábrica, unas oficinas o un centro comercial. Por eso, aquel día José María Aznar hizo automáticamente irreversibles las obras del AVE a Levante que, desde 1996, sus gobiernos habían anunciado, gestado, proyectado e impulsado en el marco del PIT (Plan de Infraestructuras de Transporte) 2000-2007, concebido para vertebrar todo el territorio nacional.

Hasta 1996 el AVE a Levante era un simple trazo de una «línea de alta velocidad no prioritaria» que unía Madrid y Valencia en un plano del PDI (Plan Director de Infraestructuras) 1993-2007, que no pasaba por Cuenca ni llegaba a Castellón, a Alicante o a Murcia. Fue en 1997, como queda constancia en el BOE, cuando el Ministerio de Fomento encargó sus primeros Estudios Informativos (o Estudios de Trazado) del AVE a Levante, los cuales, una vez redactados por las consultoras correspondientes, fueron sometidos en 1999 al transparente procedimiento de información pública que finalizó el 25 de abril de 2000, en el que participaron con más de cien mil alegaciones, tanto los ciudadanos particulares como los gobiernos autonómicos, las diputaciones y los ayuntamientos afectados, fiel reflejo de la complejidad de las decisiones pendientes para seleccionar los trazados más adecuados que, finalmente, deberían de superar los exigentes trámites de las DIA (Declaración de Impacto Ambiental) previas a la aprobación definitiva.

El análisis objetivo de las alegaciones recogidas permitió en 2000 a Fomento la elaboración de una solución integradora que fue presentada en el Congreso y en el Senado, para discutirla con las instituciones afectadas y, finalmente, tras ser perfeccionada, lograr su aprobación por los gobiernos autonómicos de Madrid, Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana y Murcia, representados por sus presidentes Ruiz-Gallardón, Bono, Zaplana y Valcárcel, convocados por este último en su sede, el 8 de enero de 2001. Este trascendental pacto de Murcia sobre trazados y calendarios permitió a Fomento solicitar inmediatamente las exigentes DIA que, una vez superadas, facilitaron la aprobación con carácter definitivo de casi todos los Estudios Informativos pendientes del AVE a Levante, como reflejó el BOE de nuevo a lo largo del año 2003.

Algunos proyectos constructivos de los tramos que no presentaban dificultades de trazado y contaban con autorizaciones medioambientales previas, como el del tramo de Picassent, habían sido encargados antes. Los restantes proyectos constructivos del AVE a Levante fueron encargados para su urgente redacción y aprobación, trámites ineludibles e imprescindibles para generalizar la fase de construcción de las obras en el corredor. A estas obras de plataforma les sucederían las del tendido de la vía, instalación de la catenaria, y montaje de los sistemas de comunicaciones, seguridad y señalización, esenciales para la circulación de los trenes de la más avanzada tecnología de alta velocidad, a 300 km/h. Entre 2000 y 2004, dentro de un programa de convenios para la integración urbana de la alta velocidad en la trama de las ciudades, Fomento también proyectó las estaciones término del AVE a Levante, como Valencia, Alicante, Castellón, Murcia y Cartagena, y las intermedias de Cuenca, Albacete, Requena, Orihuela y Elche, con el objetivo primordial de vertebrar todas las provincias con España y con Europa, así como las grandes comarcas interiores, como la «valencia castellana» o las «huertas», que sin el AVE quedarían descolgadas del futuro.

El diseño del AVE de Levante en el PIT 2000-2007, incluyendo los tramos planificados dentro del corredor del Mediterráneo, sumaba 960 Km. entre líneas acondicionadas y líneas de nuevo trazado. Su estado de ejecución en 2004 era: 85 km. en servicio; 244 km. en obras; 315 km. en proyecto; 104 km. con DIA aprobada; 140 km. en fase de DIA y 72 km. en Estudio Informativo. Es decir, cuando se produjo el cambio de gobierno en 2004, el AVE a Levante era imparable. Por muchos esfuerzos que hagan algunos para disimular estos hechos, es fácil demostrar que las grandes inversiones del AVE a Levante también estaban autorizadas por los Consejos de Ministros presididos por Aznar, y contaban con los preceptivos reconocimientos de existencia de consignaciones presupuestarias plurianuales y los consiguientes expedientes de retención de créditos para el periodo 2004-2010 por parte de la Intervención General del Estado en los tramos licitados, lo que convirtió a Fomento en mero controlador técnico de las obras y en licitador de los tramos pendientes, sin posibilidad de atribuirse mayores méritos políticos que la exigencia de cumplir los plazos programados y de pagar de las certificaciones, deberes que no quiero juzgar en las efemérides de la inauguración de la línea de alta velocidad Madrid-Valencia-Albacete dentro del corredor del AVE a Levante.

Su puesta en servicio es un hito histórico para Madrid, Cuenca, Albacete y Valencia. Pero es bueno recordar que la alta velocidad es la más moderna infraestructura capaz de fortalecer la cohesión social y corregir los desequilibrios territoriales dentro y fuera de España. Así se concibió en el PIT 2000-2007, y así tiene que continuar. El AVE a Levante no puede detenerse en Valencia y en Albacete. Las obras deben de continuar sin pausa hasta Castellón, Alicante, Elche, Murcia o Cartagena, cumpliendo los requerimientos europeos de «alta velocidad», para unir todas las capitales y vertebrar todo el territorio. Amén.

Francisco Álvarez Cascos
Artículo publicado en el diario ABC

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Por culpa de Cenzano y Pulido, más de Pulido que de Cenzano, la ampliación del Museo de A. Abstracto no estará cuando se decida la Capitalidad Europea


Pulido en el acto de imposición de la medalla de oro del Patronato Universitario Gil de Albornoz a Cenzano y a Luis Muelas, en reconocimiento por su gran labor al frente del Ayuntamiento y la Diputación respectivamente.


LA OPINIÓN.- El viernes 28 de marzo de 2008, el alcalde de Cuenca, Francisco Pulido, acompañado por el concejal de Cultura, Emilio Català, anunció en rueda de prensa y tras la reunión que mantuvo con el director de la Fundación Juan March, Javier Gomá, con el arquitecto Juan Navarro Baldeweg y con el director de Exposiciones de la Fundación, Manuel Fontan que el proyecto de ampliación del Museo de Arte Abstracto de Cuenca estaría finalizado en 6 meses, y que posteriormente se iniciarían los trámites para la adjudicación de la obra que podrían prolongarse por unos dos meses y, finalmente, la ejecución de la misma que se estimaba en unos dos años. Es decir, que hoy, 9 de diciembre de 2009 estaríamos a tan solo 7 meses de la apertura de los nuevos espacios y por tanto de este recurso cultural tan importante para nuestra ciudad ya adaptado a las necesidades actuales y completamente renovado, ya que éste debería estar concluido según aquellas declaraciones del Primer edil a finales de agosto de 2010.

Sin embargo, una vez más la historia se repite y hoy el mismo personaje que se ha reunido con el otro mismo personaje, o sea, el arquitecto, nos vuelve a presentar la finalización del proyecto de ampliación, es decir, de los planos, porque no es otra cosa, emplazándonos para otros tantos meses como en aquella ocasión, y por eso mucho nos tememos que si en dibujar los dichosos planos están tardando veintitantos meses, para que se lleven a cabo el resto de los pasos, entre los que se encuentra la tramitación burocrática y luego realizar las obras y dotarlo de contenido después de finalizadas éstas, va a pasar aún bastante más de los dos años de los que hablaron hace ahora casi otros dos, aquel 28 de marzo de 2008.

Por aquel entonces Pulido destacó “la importancia de este proyecto que dotará a Cuenca de un nuevo espacio cultural que vendrá a complementar nuestra oferta de cara a conseguir la capitalidad cultural en el año 2016", como no podía ser de otra forma, pues es la frase obligada en estos tiempos que corren para cualquier político del lugar que se precie, o de cualquier otro que nos visite de este invento de autonomía que se empeñaron en llamar Castilla la Mancha. Pero, siendo muy optimistas, si seguimos a rajatabla el mejor de los calendarios posibles, dando un mes para la presentación de los planos, cuatro más para la tramitación burocrática y otros 24 para la ejecución de las obras –de las que no nos ha hablado sobre la forma de financiarlas-, y otro mes para la dotación de contenido, nos situamos en el verano de 2012, fecha posterior a la que se decide la ciudad que será la Capital de la Cultura Europea en el año 2016, con lo que un recurso cultural de tanta importancia no contará todavía con todo su potencial en el momento en el que el jurado valore todas las opciones que presenten las ciudades que aspiran a ese galardón, que ya habrá sido en septiembre u octubre de 2011.

No está pendiente Pulido de lo que pasa, o pronto se le olvida; por ejemplo, ya les decíamos en El Cronista hace unas semanas que va a firmar, si se cumple lo anunciado por él mismo y la vicepresidente del Gobierno manchego, María Luisa Araujo, este mismo mes de diciembre, el mismo convenio para el Palacio de Congresos y Exposiciones que firmara ya Martínez Cenzano con la Junta el día 10 de noviembre de 2006 y, ahora, nos hace algo parecido con los planos para la ampliación del Museo de Arte Abstracto. Al menos podía informarse y repasarse los temas antes de dar las ruedas de prensa, para no quedar de esta manera.

Deberían haber puesto entusiasmo y esmero, aunque ya sabemos que eso en Cuenca no se lleva, y hablo en plural, porque de esta eternización tampoco puedo excluir al alcalde anterior. Ya lo anunció Cenzano el 21 de marzo de 2005, y tenía más de dos años para haber avanzado de forma sustancial en el asunto, incluso para haberlo dejado casi concluído, pero no hizo prácticamente nada; eso sí, a unos meses de elecciones mercadeó con el tema utilizando la cultura como coartada y presentando junto a Barreda la candidatura europea, como siempre ha hecho el Psoe cada vez que llegan las elecciones; recordemos aquél eslogan de “Cuenca, Marco Incomparable para la Cultura” que usó el Psoe ya en la campaña del 83, que fueron las primeras elecciones locales y autonómicas, para convencernos de que el desarrollo futuro de Cuenca no iba a venir de la industria productiva, ni de la Universidad, ni de las comunicaciones, ni de la capitalidad administrativa, ya que eso se reservaba para otras lugares de la recien estrenda Autonomía.


Así que entre el uno y el otro, aunque más por el uno, Pulido, que por el otro, Cenzano, en esto también vamos a llegar tarde.

El Proyecto definitivo para ampliar Museo Arte Abstracto se presentará en 2010


LA NOTICIA.- ABC.es

Cuenca, 9 dic (EFE).- El proyecto definitivo de ampliación del Museo de Arte Abstracto Español de Cuenca, que ocupa actualmente parte de las Casas Colgadas de la capital conquense, se presentará probablemente a principios del próximo año, según ha adelantado hoy el alcalde de la ciudad, Francisco Javier Pulido.

El regidor ha explicado que el equipo del estudio del arquitecto Juan Navarro Valdeweg está ultimando el proyecto definitivo y estudiando las propuestas y modificaciones que han planteado al proyecto inicial el Ayuntamiento de Cuenca y la Fundación Juan March, que gestiona la pinacoteca conquense, en una reunión que se ha celebrado recientemente.

Pulido ha indicado que es probable que el proyecto definitivo se pueda presentar a principios de 2010, lo que permitiría licitar las obras de ampliación del museo.

El proyecto inicial plantea la ampliación de la pinacoteca bajo el subsuelo de la Plaza de Ronda, situada junto al inmueble de las Casas Colgadas, dentro del casco histórico de Cuenca declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

En este sentido, Pulido ha puntualizado que el proyecto deberá ser visado por la Demarcación de Cuenca del Colegio de Arquitectos de Castilla-La Mancha y por la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento de Cuenca.

Posteriormente se enviará a la Comisión Provincial del Patrimonio y al Instituto del Patrimonio Histórico Español del Ministerio de Cultura y, cuando estos dos organismos den su aprobación, ya sólo restará sacar las obras a licitación, con las fuentes de financiación que se consideren necesarias, adjudicarlas y comenzar a ejecutarlas, ha añadido.

También se enviará el informe definitivo a la entidad Icomos-España (que asesora a la Unesco en materia de patrimonio histórico y artístico), ha apuntado Pulido, si bien ha recordado que se trata de un organismo consultivo que no toma decisiones. EFE

martes, 8 de diciembre de 2009

Mientras aquí ya todos amnésicos con el reparto injusto de titulaciones, los demás sitios de este invento de Autonomía ya disfrutan del botin



EDITORIAL.- Mientras aquí ya nadie dice ni pío sobre el nuevo reparto injusto que se aprobó a mediados del año pasado, con respecto a las titulaciones del Campus de Cuenca, del que una vez más salimos claramente perjudicados; en los demás sitios de este invento de Comunidad Autónoma se están preparando ya para empezar a disfrutar del botín que les ha reservado la Junta de Comunidades.

Por ejemplo, Martínez Ataz, el Rector de la Universidad de Castilla la Mancha, tan nefasto como el anterior, Luis Arroyo Zapatero, para los intereses de Cuenca, el pasado 13 de noviembre aseguró que en mayo del próximo año 2010 estará lista la nueva Facultad de Medicina de Ciudad Real y que «estarán los deberes bien hechos y los profesores en sus despachos, preparando sus clases, sus laboratorios o su práctica docente»; la otra carrera que se implantará después, será la de psicología, mientras que en Cuenca se pierde Psicopedagogía, porque no está dentro del contexto de Bolonia, por lo que está claro que se debería haber contemplado Cuenca en su implantación para que no se perdiera aquí una carrera. Toledo estrenará Escuela de Arquitectura -no podemos ignorar que Arquitectura Técnica está en Cuenca lo que hace paradójico esa implantación y perjudica los intereses de nuestro Campus- a partir de septiembre del año 2010 en el Campus Tecnológico de la Fábrica de Armas, es lo que anunciaron el vicerrector de Docencia y la responsable del Campus de Toledo el 3 de marzo pasado; los otros estudios recordemos que serán los de Traducción e Interpretación. La implantación de Farmacia en el campus de Albacete ya tiene fecha, el curso 2010/2011 y también tiene ubicación, en el nuevo edificio que se hace en frente de la Politécnica del que las obras avanzan a buen ritmo con ese fin para lo que se están destinando ocho millones de euros, pero no será el definitivo, porque posteriormente se levantará otro edificio propio y exclusivo, junto a la Facultad de Medicina para esta nueva titulación; las otras carreras que se van a implantar posteriormente son la ampliación de Medicina, y la Ingeniería de Telecomunicaciones que debería haberse quedado en Cuenca ya que aquí está Imagen y Sonido, lo que elimina nuestras aspiraciones. En Cuenca también comenzarán en 2010 estudios nuevos, pero de menor demanda y salida profesional, como lo es Periodismo, que lo hará en el Edificio Polivalente, posteriormente ya veremos qué pasa con Turismo, porque estos estudios existían ya aquí, dentro de la Facultad de Humanidades, y nada se sabe del compromiso para estudiar otra alternativa con otra titulación diferente, pero nos estamos ya temiendo lo peor, que nada de nada.

Y en Guadalajara, que no está integrada en la Universidad de Castilla la Mancha, sino en la de Alcalá de Henares, la Junta ya ha preparado una cantidad importantísima de dinero para desarrollar un Campus en esa ciudad.

El pasado 27 de noviembre, el Consejo de Gobierno de la Universidad de Alcalá aprobó algunas de las nuevas titulaciones que se impartirán en el futuro Campus Universitario de Guadalajara: Odontología, la doble titulación de Administración y Dirección de Empresas (ADE), Turismo y Comunicación que contempla la triple vía de Ocio y Comunicación, Comunicación Corporativa e Información Impresa y Multidifusión. Estas titulaciones se suman a la ya aprobada de Traducción e Interpretación y el siguiente paso consistirá en la aprobación de una Ingeniería, cuya especialidad está aún por determinar.

Alguien podría pensar que Guadalajara es nuestra compañera en este viaje dentro del vagón de la marginación que viene padeciendo Cuenca desde que se engendró Castilla la Mancha, pero quien crea eso, pensamos que está muy equivocado; y la noticia que comentamos hoy es un ejemplo más de que eso no es cierto.

Cuando se creó la Universidad Autonómica, los guadalajareños pensaron que su cercanía y la relación histórica con la Universidad de Alcalá de Henares, era un tesoro que de ninguna de las maneras podían arriesgarse a perder a cambio de algo que no se sabía por aquel entonces a ciencia cierta cuál sería su destino y en lo que, en todo caso, ellos pensaban que se verían discriminados como empezaba a suceder en otras cuestiones.

Al hablar de la marginación que Cuenca siempre ha sufrido por parte de la Junta de Comunidades de Castilla la Mancha, siempre nos acordamos de Guadalajara, para consolarnos, de alguna manera, por aquello de no estar solos. Y no hace falta recordar esa frase que dice aquello de "mal de muchos, consuelo de tontos".

Pero nunca más lejos de la verdad, si nos creíamos que Guadalajara se encontraba con nosotros compartiendo sitio en el banquillo de reservas.

Si Guadalajara no tiene tuvo su Campus universitario, como los de Albacete, C. Real o Toledo, es porque en su día renunció a tenerlo. Pensó que le convenía más seguir dentro del distrito universitario de la Universidad de Alcalá porque sus políticos pensaron, que si se adscribían a la Universidad de Castilla la Mancha, perderían su derecho a poder matricularse en aquella otra, y vaya usted a saber con las titulaciones que se encontrarían con el reparto en ésta.

Guadalajara, aunque no tenga un Campus de la Universidad de Castilla la Mancha, sí que tiene las titulaciones que son comunes en todas las provincias. Pero es más, ya la Junta de Comunidades de Castilla la Mancha ha diseñado un nuevo Campus para Guadalajara -de hecho será como una universidad-, que contará con múltiples titulaciones nuevas y de implantación única, la mayoría dentro del ámbito científico y tecnológico; es más, también dispondrá de un Polígono Científico-Tecnológico para impulsar la investigación y la tecnología aplicada a las empresas desde la Universidad. Para ello ha presupuestado dos partidas, una de 180 millones de euros para la realización del nuevo Campus, que incluyen los edificios, la urbanización y el desarrollo de los estudios; y otra de 30 millones de euros para el Polígono.

Sin embargo aquí nos la vuelven a dar con queso, y lo único que pasa es un día de lamentos pero al día siguiente y el de después y al otro, ya nada. Es gravísimo que nos olvidemos de lo dicho por el viceconsejero de Ciencia y Tecnología la misma tarde de la manifestación que tuvo lugar en Cuenca contra el reparto injusto de titulaciones, que una vez más es contrario a los intereses de los conquenses, en aquella reunión con los directores de los centros universitarios, y todo apunta que engañándolos para frenar en seco las movilizaciones, cuando les prometió varios postgrados y un Parque Científico y Tecnológico en nuestra ciudad; de lo que ya nadie dice nada.

Nosotros, al menos, tenemos muy presente aquella manifestación por las calles de nuestra ciudad, en protesta por el nuevo reparto, injusto y marginador, de titulaciones universitarias que había aprobado el Gobierno de Barreda. De nuevo Cuenca era discriminada por una decisión tomada desde los poderes autonómicos de Castilla la Mancha; y que fuera una vez más con respecto a la Universidad, era algo que la inmensa mayoría de los conquenses no estaban dispuestos a aceptar.

El 8 de abril de 2008, en una mañana fría y en plena jornada laboral, más de 2000 personas, la mayoría estudiantes, respondieron a la llamada de auxilio que se hacía desde todos los sectores de la comunidad universitaria, ofreciendo así una respuesta que, a todas luces, hacía presagiar la que se avecinaba fruto de la indignación masiva y colectiva. Era previsible que se estaba originando un movimiento importante, en el que seguramente los conquenses encontrarían el cauce para expresar todo el malestar por el maltrato secular desde la Junta de Comunidades.

Sin embargo aquello no pasó de lo incipiente, probablemente, por el exceso de credulidad y la falta de experiencia para estos casos de las personas que dirigían aquel movimiento que decidieron llamar “Salvemos el Campus”. Y me refiero al exceso de credulidad porque, en un rato, a unas horas de haberse celebrado la manifestación, el viceconsejero de Ciencia y Tecnología, Díez Barra, prácticamente dejó desmantelado el movimiento reivindicativo, al hablar de la posibilidad de desarrollar un Parque Científico y Tecnológico y algún postgrado en torno a las telecomunicaciones y la arquitectura, que con el paso de los meses, ya año y medio, y las nuevas decisiones de la Junta, se está viendo claro que era mentira.

Desde aquella primera reunión con el viceconsejero de Ciencia y Tecnología el mismo día de la manifestación, quedaba al descubierto la maniobra que con cierta pericia iniciaba el Gobierno que dirige Barreda, en complicidad con el Órgano Rector de la Universidad, para seducir algunas voluntades y dividir al embrión que según lo visto aquel 8 de abril, tenía todos los visos de poder hacerse un gigante. Y esto es lo que no han querido ver los representante delegados por el Campus de Cuenca; y de lo que ha huido el Alcalde, bien por falta de capacidad o, quizá para no enfrentarse ni a la jerarquía, ni a sus compañeros de Partido en otras provincias.

Como ya anunciamos en El Cronista Independiente de Cuenca, el 21 de abril de 2008 se llegó a un acuerdo a tres bandas, poco creíble y vulnerable, entre representantes del Gobierno autonómico, del Rectorado, y de los diversos colectivos que conforman la Plataforma “Salvemos el Campus” de la que formaban parte la mayoría de directores y decanos del mismo.

Básicamente, los puntos de encuentro se centraban; por un lado, en considerar Turismo como una titulación ya implantada en Cuenca, puesto que ya formaba parte de una de las líneas de Humanidades que se venía desarrollando en nuestra ciudad y, por tanto, con la implantación del nuevo sistema que se establece como consecuencia de la adaptación a los tratados de Bolonia, susceptible de transformarse en una titulación de grado. De esa manera ese “hueco” hasta el cupo mínimo de dos titulaciones nuevas asignadas por Campus se completaría, además de con Periodismo, con otra carrera nueva, que podría ser Veterinaria; aunque la Junta planteó Ingeniería en Biotecnología.

Por otra parte, y en lo referente a la Politécnica, se añadiría a los estudios de grado de Imagen y Sonido, un Máster en Telecomunicaciones y a los actuales de Arquitectura Técnica, otro en Ingeniería de la Construcción. A ello se le sumarían los centros tecnológicos que complementan la formación en ambas especialidades universitarias.

Paradójicamente aquí ya nadie ha dicho nada, a pesar del flagrante incumplimiento del Gobierno de Barreda. Por ello, debemos refrescar la memoria tanto los ciudadanos, como autoridades, por si es necesario, que todo hace pensar que lo será, replantearse la movilización cívica que aquellos días del mes de abril de 2008 surgía con grandes expectativas de crecer, aunque lo vemos difícil.