LA OPINIÓN.- Cuentan que Pulido ya ha sugerido a su Grupo Municipal, y a la dirección del Partido Popular, su deseo de dejar la Alcaldía; les ha comentado que no puede más, y que se está pensando abandonar. Pero no nos extraña, porque su problema no es solamente que tenga un concejal en fuera de juego, o mejor dicho, jugando con el equipo contrario, sino que además le ponen la zancadilla la presidenta, la mayor parte de la afición, y no sabemos muy bien si su propia plantilla.
Flaco favor le está haciendo el Partido Popular al alcalde de Cuenca en el asunto del concejal Miguel Ortiz; en lugar de mediar desde un principio, para intentar resolver una situación que se le presenta gravísima a Pulido en el Ayuntamiento de Cuenca, lo que hacen sus dirigentes es echar más leña al fuego. Las declaraciones que hizo el otro día el secretario de Castilla la Mancha de este Partido, Vicente Tirado, continúan en la línea incendiaria que Francisco Pulido intentó corregir la semana pasada, pues claramente había empezado a suavizar su discurso para buscar algún tipo de acercamiento. Pero no le dejan.
Se debería preguntar Pulido quién es su mayor enemigo, si realmente es Miguel Ortiz, por díscolo que lo vea ahora; o si éste se encuentra entre los dirigentes del Pp que le están lanzando capotes envenenados, con declaraciones como las del nº 2 de Castilla la Mancha, o como la nº 1 de Cuenca, Mª Ángeles García, no mediando, sino haciendo todo lo contrario.
Parece claro que al Pp de Cuenca y de Castilla la Mancha, le importa poco el Ayuntamiento de Cuenca, o nada, porque si no, no se entiende; o quizá sea porque se quieran sacar de encima al propio Pulido. Si miguel Ortiz deja de ser concejal del Grupo Popular, lo de Pulido como alcalde de nuestra ciudad puede tener los días contados; y en el supuesto más optimista para él, a lo único que aspiraría es a un Gobierno Municipal en minoría, y por tanto a negociar con el resto de los grupos municipales cada una de las propuestas que pretenda llevar a cabo el Equipo de Gobierno; y eso nos parece poco probable, pues la forma despótica de administrar la Institución, y las peleas constantes tanto con los socialistas, como con la concejal de Izquierda Unida, lo convierten en una tarea demasiado complicada para un político neófito que hasta el momento ha demostrado tener poca mano izquierda, y escasa capacidad de negociación.
Pero lo de gobernar sin la mayoría absoluta, simplemente nos parece improbable, pues con el Psoe no tiene nada que hacer, con su secretario general de castilla la mancha reprobado, y con la concejala de Izquierda Unida tampoco, pues además se queja de haber sido engañada por el propio alcalde en el tema de la privatización del agua, al haberle asegurado que no se iba a privatizar, poco antes de que se hicieran públicas las gestiones que habían emprendido ya algunos de los responsables del Equipo de Pulido, negociando con algunos empresarios en esa dirección privatizadora.
Cuanto más enemisten a Pulido y a Ortiz, peor lo va a tener el primero, y más difícil va a ser que el Partido Popular continúe con las riendas del Ayuntamiento de Cuenca; pero con actitudes como la del Pp provincial, o con declaraciones como las que ha hecho su secretario autonómico, en lugar de ayudar a mejorar, lo que hacen es poner más dificultades a lo que ya de por sí está más que complicado. Y acercar a Francisco Pulido a precipitar el final de una Alcaldía que le ha quedado demasiado grande.
Flaco favor le está haciendo el Partido Popular al alcalde de Cuenca en el asunto del concejal Miguel Ortiz; en lugar de mediar desde un principio, para intentar resolver una situación que se le presenta gravísima a Pulido en el Ayuntamiento de Cuenca, lo que hacen sus dirigentes es echar más leña al fuego. Las declaraciones que hizo el otro día el secretario de Castilla la Mancha de este Partido, Vicente Tirado, continúan en la línea incendiaria que Francisco Pulido intentó corregir la semana pasada, pues claramente había empezado a suavizar su discurso para buscar algún tipo de acercamiento. Pero no le dejan.
Se debería preguntar Pulido quién es su mayor enemigo, si realmente es Miguel Ortiz, por díscolo que lo vea ahora; o si éste se encuentra entre los dirigentes del Pp que le están lanzando capotes envenenados, con declaraciones como las del nº 2 de Castilla la Mancha, o como la nº 1 de Cuenca, Mª Ángeles García, no mediando, sino haciendo todo lo contrario.
Parece claro que al Pp de Cuenca y de Castilla la Mancha, le importa poco el Ayuntamiento de Cuenca, o nada, porque si no, no se entiende; o quizá sea porque se quieran sacar de encima al propio Pulido. Si miguel Ortiz deja de ser concejal del Grupo Popular, lo de Pulido como alcalde de nuestra ciudad puede tener los días contados; y en el supuesto más optimista para él, a lo único que aspiraría es a un Gobierno Municipal en minoría, y por tanto a negociar con el resto de los grupos municipales cada una de las propuestas que pretenda llevar a cabo el Equipo de Gobierno; y eso nos parece poco probable, pues la forma despótica de administrar la Institución, y las peleas constantes tanto con los socialistas, como con la concejal de Izquierda Unida, lo convierten en una tarea demasiado complicada para un político neófito que hasta el momento ha demostrado tener poca mano izquierda, y escasa capacidad de negociación.
Pero lo de gobernar sin la mayoría absoluta, simplemente nos parece improbable, pues con el Psoe no tiene nada que hacer, con su secretario general de castilla la mancha reprobado, y con la concejala de Izquierda Unida tampoco, pues además se queja de haber sido engañada por el propio alcalde en el tema de la privatización del agua, al haberle asegurado que no se iba a privatizar, poco antes de que se hicieran públicas las gestiones que habían emprendido ya algunos de los responsables del Equipo de Pulido, negociando con algunos empresarios en esa dirección privatizadora.
Cuanto más enemisten a Pulido y a Ortiz, peor lo va a tener el primero, y más difícil va a ser que el Partido Popular continúe con las riendas del Ayuntamiento de Cuenca; pero con actitudes como la del Pp provincial, o con declaraciones como las que ha hecho su secretario autonómico, en lugar de ayudar a mejorar, lo que hacen es poner más dificultades a lo que ya de por sí está más que complicado. Y acercar a Francisco Pulido a precipitar el final de una Alcaldía que le ha quedado demasiado grande.
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