El Tiempo en Cuenca

martes, 13 de noviembre de 2007

Pulido prometió en elecciones trabajar para que se hicieran pronto las infraestructuras previstas para Cuenca; pero todavía no ha abierto la boca.



A pesar de que ya de que ya se conocen los presupuestos generales del Estado y de Castilla la Mancha, que regirán en el año 2008, y que los mismos no contemplan las inversiones para acabar las grandes obras en materia de infraestructuras que nos afectan, sino que de ellos se desprende la eternización de las mismas; el Alcalde de Cuenca a penas ha abierto la boca para exigir que se cumpla lo prometido.

Recordemos que en campaña electoral Pulido afirmaba en sus declaraciones, que "no hay que olvidar la importancia que tiene la finalización de las infraestructuras que puso en marcha el Partido Popular cuando gobernaba la nación: el AVE y la Autovía Cuenca-Tarancón, así como el desarrollo de las comunicaciones con Teruel, Guadalajara y Albacete con celeridad. Para ello, el candidato popular se mostró dispuesto a trabajar decididamente y exigir la consecución de todas estas obras que llevan un retraso considerable desde que el Partido Socialista gobierna nuestro país. Asimismo, y en este sentido, recordó el compromiso de la Presidenta Regional del PP y candidata a la Junta de Comunidades de CLM, Mª Dolores de Cospedal, de comunicar todas las capitales de provincia por autovía".

Sin embargo, ya muy pronto, a penas a un mes de ser proclamado como nuevo alcalde de Cuenca, se inhibió ante las declaraciones de dos de los máximos responsables de Renfe cuando éstos dijeron que el corredor de Ferrocarril Convenional Madrid-Valencia por Cuenca, no contaba en los planes para el tráfico de mercancías, esgrimiendo el perogrullesco argumento de que el viario, ténicamente no contaba con lo exigible para que ello fuera posible. En aquel momento, Pulido tuvo fácil la respuesta, porque es evidente que la situación de avandono de la línea, imposibilita que en ese estado circulen convoyes de mercancías con un mínimo de garantía para prestar un servicio que responda a las premisas de eficacia y seguridad. Al Alcalde se le presentaba una oportunidad extraordinaria para recordar los más de 200 millones de euros que contemplaban los PGE del año 2000, y de los que jamás se supo su destino; así como de las ventajas para restaurar y modernizar una línea que recortaría más de 100 km la de Alcázar y Albacete, con la posibilidad de conectar el Puerto Seco de Coslada con el Puerto de Valencia con una reducción muy importante en distancia, tiempo y dinero que se paga por el transporte. Pero muy al contrario de lo que prometió en elecciones, y de lo que además es su obligación, Pulido se mantuvo callado. Se inhibió.

Como también lo hizo con respecto a su obligatoria intervención para negociar con las administraciones del Estado y de la Junta de Comunidades en el el periodo de elaboración de los Presupuestos que, además de ser los que regirán las inversiones en 2008, establecen las líneas maestras en cuanto al ritmo de ejecución de los proyectos, porque en ellos se reflejan las partidas que se irán destinando en las siguientes anualidades. Mientras otros alcaldes se dedicaban a ir de despacho en despacho, incluso a veces "dando la lata", ¿por qué no?, para asegurarse el beneficio de sus pueblos y ciudades por la única vía posible, que es la presupuestaria, Pulido estaba perdido entre el "rifi rafe" de la subida de sueldos, los nombramientos cargados de depotismo, y la designación de asientos en el protocolo de los actos. Luego que no eche la culpa a los del otro partido y ya está; que no, que eso ya está muy visto y sabemos que es una verdad a medias. Eso no nos vale.

Y ahora encima de que llega tarde, que nos lo han vuelto a colar, todavía sigue callado. No sabemos cuál es su opinión acerca de que para el año 2011, los PGE todavía contemplen una partida presupuestaria de más de 40 millones de euros para la ejecución de la Autovía de Tarancón; o, que para la de Teruel haya unos míseros 500 mil euros, como el año anterior y el anterior, desde los 40 millones de 2004 que, con la entrada de Zapatero en el Gobierno, se disiparon. No conocemos qué piensa de que el proyecto esté totalmente parado en un cajón del Ministerio de Medio Ambiente desde el día 3 de abril del año 2003, y que los dirigentes del Psoe nos vuelvan a poner la disculpa de las enormes dificultades medioambientales; como si se tratara de cruzar "El Cañón del Colorado", a través de frondosos bosques entre inmensas colinas.

Tampoco se le ha visto abrir la boca para expresar su malestar, por el vigésimo cuarto incumplimiento de la realización del Palacio de Exposiciones y Congresos de la Ciudad de Cuenca, que prometió Bono en su primera campaña electoral del año 83, y que aún no cuenta ni con un proyecto sobre el plano; por mucha comedieta que se marcaran cuando finalizaba la anterior legislatura con presencia incluida de un Consejero, para firmar un convenio de litaratura más enrevesada que un auto judicial. Nos dijeron que se trataba de un estudio de dimensionamiento para garantizar la viabilidad -me imagino que el expresionismo abstracto de la frase, se correspondía con la intención de reflejar una realidad inexistente-. Ahora parece ser que el problema viene dado por la ubicación; que, claro, como decían últimamente que se iba a poner en los terrenos de Renfe, y la nueva corporación pretende renegociar el contrato del Ayuntamiento con Adif, pues entonces nada, aunque lo lleven prometiendo, cada vez que se acercan las elecciones, desde hace veinticuatro años. Y Pulido callado, porque vaya usted a saber qué idea tiene para ese espacio; aunque nos tememos que si Cenzano quería reservarlo para los especuladores del ladrillo, sembrándolo de esos feos; que digo feos, horrorosos edificios que se hacen en Cuenca, Pulido aunque prometió otra cosa, en esto como en casi todo lo demás, también haga lo mismo.

Nada ha dicho tampoco Pulido sobre la Autovía de Albacete, que recordemos Barreda prometió que estaría en servicio en el 2008; y que sin embargo, ya se va para el once; aunque si las cosas siguen como hasta ahora, con unos raquíticos 300 mil euros en los PGCLM, nos tememos que siga la marcha de las demás.

Y es que Pulido vuelve a ser como sus predecesores, un alcalde de andar por casa.

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