El Tiempo en Cuenca

viernes, 27 de marzo de 2009

Sarrión, uno de los que participaron en La Mesa del Pacto por Cuenca y defensor del Apeadero de La Estrella, tiene intereses urbanísticos cerca

LA OPINIÓN.- “Vamos retrasados y el bulevar hay que hacerlo ya”; parece que lo que le importa a Abraham Sarrión, el presidente de la patronal, no es si lo que va a haber en La Estrella es una auténtica estación del AVE o, en cambio, un apeadero sin tan siquiera contar con el servicio de los Trenes Lanzadera, no; lo único que le obsesiona a Sarrión es que aquella zona esté comunicada cuanto antes, aunque esté en el quinto pino, y aunque sea mediante uno de los carreteruchos de los que él mismo es el constructor, como la raquítica y mal acabada Ronda Oeste.

Lo que quiere Sarrión es que aquello dé la sensación pronto de que va a ser algo, y que el Ayuntamiento corra con el gasto del camino –bulevar si lo queremos decir a los finolis para que parezca algo- que llegue hasta las proximidades de la zona en la que él tiene una porción importante de terreno que, por cierto, está mucho más cerca de La Estrella que el núcleo urbano de Cuenca.

Al día siguiente de la entrevista del Alcalde Pulido con algunos responsables de Adif, La Tribuna de Cuenca publicó tres artículos que seguían la misma línea editorial que siempre lleva este diario, interesado y partidista, con respecto a situar la Estación del AVE en el quinto pino, allá en la zona donde su editor, el constructor Méndez Pozo, se ha creado intereses inmobiliarios.

Hace casi año y medio, informábamos de la relación del editor de la Tribuna y de algunos cargos en ese momento del Partido Popular y del Ayuntamiento con respecto a algunas empresas beneficiarias de Planes de Acción Urbanística en el entorno del Paraje de La Estrella, donde se pretende ubicar el Apeadero del AVE; también dábamos cuenta de otra serie de PAUs presentadas en el término de Arcas, en la misma dirección. Germán Chamón, que era secretario provincial del Partido Popular, forma parte del Consejo de Dirección de Verdes Desarrollos Urbanos, que es una constructora beneficiaria de varios de los PAUs, y de la que es su presidente Méndez Pozo, dueño de la Tribuna, y en la que también es socio Perfecto Álvarez, que además de ser Consejero de la Caja de Ahorros y tener fuertes lazos con el Pp, es el tío carnal del nombrado por el Equipo de Gobierno del Pp gerente de Urbanismo, Héctor Álvarez.

Además, el concejal de Urbanismo, Pedro Vallejo, tiene vinculación profesional con el sector inmobiliario, y su mujer, Sonia Sáiz Herráiz, es la presidenta del Colegio de Arquitectos de Cuenca, es hermana de Jesús Sáiz Herráiz, que es gerente del consorcio empresarial DAVECON que también va a construir viviendas por allí, y trabaja para la empresa constructora e inmobiliaria del secretario del Pp.

DAVECON la integran cinco empresas, de la que una es DALPA, y uno de sus propietarios Gonzalo Igualada, que es ingeniero de caminos Municipal y jefe del área de planeamiento urbanístico del Ayuntamiento. Igualda es el autor del informe con datos falsos que utilizó el anterior Alcalde, Martínez Cenzano, para dotar de credibilidad la argumentación de que existe una enorme dificultad para soterrar las vías, y decantar la opinión en el sentido que les convenía, de los componentes de la Mesa del Pacto por Cuenca, mientras que fue ocultado otro informe del otro ingeniero municipal, Vicente Belinchón, que demostraba la viabilidad del soterramiento y que lo emitió porque no quiso participar de lo firmado por Igualada; los lazos familiares de la Presidenta de los arquitectos de Cuenca, y su política dentro del Colegio Oficial favorable de forma incondicional hacia este entramado, provocó la dimisión de la que era secretaria del Colegio de Arquitectos, Carmen Mota, como reconoció ella misma en un comunicado.

Pues bien, como decíamos, este diario publicó tres artículos a principios de mayo de 2008, uno de los cuales titulado Trenes y "demagogia" que se basaba en la opinión del constructor y presidente de la Patronal de Cuenca, Abraham Sarrión, que también tiene negocios en el término de Villar de Olalla cerca del sitio donde va a ir el Apeadero.

En ese artículo, Sarrión dijo que se deje de hacer «demagogia» sobre las posibilidades de la línea de tren convencional de Cuenca para el transporte de mercancías. Nos parece claro que a esta clase de empresarios, con tal de que les quede más espacio para llenar de edificios en busca del negocio rápido, en ese empeño se cargan el Ferrocarril Convencional, el AVE, y lo que haga falta.

El presidente de la Ceoe-Cepyme destacó que la confederación empresarial que preside apuesta con fuerza por que la vía de tren «desaparezca del centro de la ciudad».

“La vía del tren parte en dos la ciudad y en el avance del Plan de Ordenación Municipal (POM) es calificada como una auténtica barrera urbanística”, declaró; no le interesa a Sarrión ninguna otra opción que no pase por desmantelar la Estación y llevarla lejos de Cuenca, aunque ello suponga seguramente la desaparición de este medio tan necesario para la vertebración provincial, el acceso a una forma adecuada de transporte de viajeros para aquellas personas que no puedan optar a la Alta Velocidad y, la posibilidad de que Cuenca tenga en el futuro alguna esperanza para un desarrollo industrial que no pase únicamente por el sector de la construcción inmobiliaria.

“El alcalde Francisco Javier Pulido también muestra interés en que la línea del tren se desvíe a su paso por Cuenca para que deje de dividir la ciudad, un proyecto ambicioso”, concluía La Tribuna en ese artículo. ¿Y eso desmontando 17 km de vía, para hacerla nueva circunvalando la ciudad, y gastando millones de euros de dinero público para nada, porque el Ferrocarril Convencional si se lo llevan lejos lo matan? Pero bueno, ¿cómo puede ser que digan eso si le han dicho que no a los 108 millones que ofrecía el Estado para integrar el AVE en la ciudad, al situar la Estación en el Centro, pudiéndose resolver con las vías soterradas en un falso túnel de un par de km el problema que ellos mismos dicen querer evitar cuando plantean lo del quinto pino?, ¿y quieren que nos creamos que hay buena intención al plantear este gasto para alejar el Ferrocarril?

Pero es que Abraham Sarrión es el personaje que un día tuvo la ocurrencia de decir en Cuenca que "El acuerdo sobre el agua nos va hacer alcanzar el futuro"; y otro día que "una vez entre en funcionamiento el AVE, el ferrocarril tradicional va a desaparecer"; o aquello del "entusiasmo que transmite el presidente Barreda por un Protocolo importantísimo que incluso reconozco haberme llegado a sorprender", aludiendo al sainete que interpretaron Barreda y la Ministra de fomento, firmando el PEIT -Plan Estratégico de Infraestructura y Transportes-. Qué se puede pensar del Presidente de la Patronal Conquense, Abrahán Sarrión, que tuvo el descaro de sentenciar, hace más de dos años, que dudaba de la viabilidad de que se instalen industrias en Cuenca "por la falta de mano de obra cualificada", y luego se sienta al lado de un consejero de la Junta que dice lo contrario, y se calla.

Como hace un par de años, que Díaz Salazar se presentó en nuestra ciudad para presidir el acto de clausura del VI Foro Empresarial de CEOE CEPYME Cuenca, y destacó la potente natalidad empresarial de nuestra provincia, y que hay que aprovechar estos crecimientos para incorporar de forma rápida e inteligente el talento que se está formando en la Universidad de Castilla-La Mancha y en el sistema educativo regional. Esto lo dijo aquí y se quedó tan ancho; precisamente en una provincia que tiene que soportar la mayor tasa de emigración de jóvenes y de fuga de talentos por la falta de titulaciones acordes con las exigencias del mercado laboral; sin carreras dentro del ámbito científico y tecnológico que abarquen la formación que demanda la empresa en nuestros tiempos.

Pero claro, esto lo expresó, como no podía ser de otra forma, en un clima favorable de adulación, sentado al lado del personaje que un día tuvo la ocurrencia de decir en Cuenca que "El acuerdo sobre el agua nos va hacer alcanzar el futuro"; u otro día que "una vez entre en funcionamiento el AVE, el ferrocarril tradicional va a desaparecer"; o aquello del "entusiasmo que transmite el presidente Barreda por un Protocolo importantísimo que incluso reconozco haberme llegado a sorprender", aludiendo al sainete que interpretaron Barreda y la Ministra de fomento, firmando el PEIT -Plan Estratégico de Infraestructura y Transportes-, que ya vemos no se cumple ni para hacer la Autovía Cuenca-Teruel; sentado al lado del Presidente de la Patronal Conquense, Abrahán Sarrión, que tuvo el descaro de sentenciar, poco tiempo antes, que dudaba de la viabilidad de que se instalen industrias en Cuenca "por la falta de mano de obra cualificada". Y luego, sin embargo, escucha al Consejero decir lo contrario, y se calla.

Abrahán Sarrión, es quien primero decía que era inviable que el trazado del AVE fuera por Cuenca, cuando corrían los tiempos en los que Bono y el Ministerio de Fomento estaban decantados por la opción de Alcázar y Albacete; y que utilizó su cargo de Presidente de la asociación empresarial conquense, para aparecer en los medios de información pronunciando frases con poco sentido, como que "situar la Estación del AVE en los terrenos de Renfe, ocasionaría una penalización de más de 15 minutos para los trenes que entrasen en la ciudad", pero con una clara repercusión hacia la opinión pública al falsearse la verdad de forma deliberada; y que votó a favor de ubicar la Estación en La Estrella, como miembro del mal llamado Pacto por Cuenca, y así contribuyó a llevarse "el gato al agua" de su interés privado, ya que es beneficiario de una importante bolsa de terreno recalificado en el término de Villar de Olalla, a poca distancia de donde se pretende situar El Apeadero.

“Hay mucho talento a disposición de las empresas y no podemos perderlo. Las empresas tienen que saber que la tarea de redefinir lo que hacemos sólo se puede hacer con el talento de las personas que manejan idiomas, Internet, que sabe diseñar o que no tiene miedo de salir al mundo”, apuntó Díaz Salazar aquel día al respecto; al lado de una persona que sonreía, mientras escuchaba del Consejero exactamente lo contrario de lo que él mismo presentaba poco antes, ante la opinión pública, como una traba infranqueable para que lo que exponía en ese momento Salazar fuera verdad.

1 comentario:

Erukto dijo...

¿No hay ninguna manera de que los pequeños empresarios de Cuenca echen a este sinvergüenza de la presidencia de la patronal? No se pueden permitir tener al mando del órgano que se supone que les defiende a alguien cuyos pelotazos urbanístcos pueden hacer mucho daño al pequeño comercio.