Autovía Zaragoza-Teruel-SaguntoLA OPINIÓN.-
Con la incorporación de España a la OTAN y a la Comunidad Europea, el Estado Español se comprometió ante ambas organizaciones a realizar en su territorio el Eje Norte Sur, mediante una vía de al menos cuatro carriles, considerado necesario por su valor estratégico; tanto para ofrecer la posibilidad de que en caso de necesidad se hiciera un uso combinado por parte del ejército y la población civil, como por ser un recurso vertebrador que facilitara los intercambios comerciales y de otro tipo, atravesando la zona central pirenáica a través de un túnel en Somport, y de ahí de norte a sur toda la Península.
Así, el Parlamento Europeo, apoyó decididamente la idea en 1988; y la Comisión Europea la catalogó de interés preferencial, pagando el 25% del total de la infraestructura.
A partir de ese momento, se realizaron múltiples gestiones por parte de instituciones, y entidades empresariales de Aragón, para tratar de que el Gobierno de España hiciera aquello a lo que se comprometió en ambos tratados de adhesión.
En octubre del año 89, los ministros del Gobierno socialista de Felipe González, Javier Sáenz de Cosculluela, de Obras Públicas y, Virgilio Zapatero, de Relaciones con las Cortes y diputado nacional por la provincia de Cuenca; anunciaron aquí la Autovía Madrid-Valencia por Cuenca, y la inclusión de nuestra ciudad en el eje Norte-Sur, lo que hoy conocemos como Autovía de Teruel, que es una parte del mismo; el ministro y diputado por Cuenca Virgilio Zapatero, declaró: “puedo asegurar que Cuenca en pocos años será una de las provincias mejor comunicadas de España, con mejores perspectivas de desarrollo, con mejor futuro entre muchas otras; la ciudad de Cuenca estará atravesada por autovías de norte a sur, y de este a oeste”.
Ante toda esta situación, la Platafroma Civica por Cuenca una vez que se constituyó, y en vista de la falta de la dilación en llevarse a cabo los trámites necesarios para llevar a cabo el proyecto, planteó a los representantes de la Diputación Provincial en octubre de 1992 esta necesidad, sin que que se consiguiera ningún pronunciamiento ni acción alguna en la misma.
Ese mes, la Plataforma mantuvo una entrevista con el entonces diputado nacional del Pp por la provincia de Cuenca, Gervasio Martínez Villaseñor, para que presentara una iniciativa parlamentaria en Las Cortes, y se negó diciendo que "es un tema para el año 2000, que no corre prisa"
Ese mismo año, la Plataforma elaboró un documento que fue entregado al entonces Alcalde de Cuenca, José Manuel Martínez Cenzano; y al Portavoz de la oposición, Andrés Moya, respaldando el Eje Norte Sur; fue presentado en el Pleno del Ayuntamiento por parte del Grupo Popular, el 9 de noviembre de 1992, y rechazado por los votos en contra del Grupo Socialista. Cenzano alegó que "no votaría algo que no es urgente y sí demagocia"
El Plan Director de Infraestructuras -PDI- elaborado en los años 92 y 93 por el Minsterio de Obras Públicas, que dirigía Borrell, y aprobado en el Consejo de Minstros presidido por Felipe González en el año 94, se incluyó la conexión con Francia a través del Túnel de Somport, y lcreando un eje que descendería a Zaragoza, Teruel y Sagunto, dejando a Cuenca fuera del proyecto.
Las Cortes de Castilla la Mancha, aprobaron por unanimidad instar al Gobierno de España a que hiciera los estudios necesarios para llevar a cabo la Autovía de Cuenca a Teruel; y caso de no hacerse, comprometían a la Junta para que tomara la iniciativa con respecto a esta Autovía hasta el límite de la provincia de Cuenca.
Fue el Gobierno de Aznar, el que despertó de nuevo el proyecto de inclusión de Cuenca dentro de este eje, por acuerdo del Consejo de Ministros, ya desde el primer momento de su primera legislatura; por lo que se hicieron los estudios, que contemplaban tres trazados alternativos. Así, el 3 de abril de 2003, el Ministerio de Fomento registró en el de Medio Ambiente el Estudio Informativo, para su informe de impacto ambiental; pero desde entonces permanece allí en la misma situación.
En mayo de 2003, en el último debate sobre el Estado autonómico que presidió José Bono, éste anunció el interés de la Junta de Comunidades de Castilla la Mancha, por hacer una Autovía que conectará Guadalajara con Tarancón, de manera que circunvalará Madrid, y que dirigirá el tráfico del Norte hacia el Sureste español, por Albacete, en la que se llamará la Autovía de la Alcarria.
Al día siguiente de este anuncio, Independientes de Cuenca ofrecía una rueda de prensa, para anunciar su temor de que esta Autovía acaparase una parte importante del tráfico previsto para la de Teruel y; por tanto que el Gobierno de España eliminara de sus planes la Autovía Cuenca-Teruel.
El pasado 21 de noviembre, Luis Carlos Sahuquillo, delegado de la Junta, y candidato del Psoe para representar a la provincia de Cuenca en las próximas Elecciones Generales, culpaba al Gobierno de la Generalidad de la Comunidad Valenciana que administra el Pp, de no querer emitir el informe favorable de impacto ambiental en la parte que afecta a su territorio; en concreto en la zona del Rincón de Ademuz. Después de casi cuatro años de inmovilización del Proyecto de la Autovía de Teruel, en un cajón de algún despacho del Ministerio de Medio Ambiente, ahora culpa al Gobierno de la Comunidad Valenciana, de lo que no tiene intención de hacer el de España.
Y lo mismo se cree que a base de declaraciones de este tipo lo convierten en “el Raúl” de la política; menudo regate les he dado, pensará.
Lo cierto es que no se va a hacer la Autovía de Teurel, y eso debería ser ya un escándalo; no se trata ya sólo de los 51 millones de euros que había en el año 2004 para esta Autovía, y que el actual Gobierno eliminó de un plumazo de los Presupuestos Generales del Estado; diga lo que diga ahora el señor Sauquillo, y pretenda engañarnos una vez más lanzando balones fuera.
Sahuquillo dijo que "el Gobierno de España tiene la firme intención de hacer esa autovía y Víctor Morlán, secretario de Estado de Infraestructuras, aragonés, así nos lo trasladó: que es un objetivo irrenunciable y que lo quieren hacer lo antes posible. Pero hay problemas medioambientales que tienen que solventar, pero no en Castilla-La Mancha, porque ya están resueltos". Pero la verdad es que hace un par de años, en nuestra ciudad, el propio Víctor Morlán, preguntado por la situación administrativa del proyecto de autovía entre Cuenca y Teruel, recordó que la misma estaba pendiente de la declaración de impacto ambiental, y auguró "fuertes condicionantes" en ésta al atravesar la línea de zonas boscosas "de gran valor ambiental" que, en su caso, obligarían a hacer "muchas correcciones" en el proyecto. Como si se tratara de una obra faraónica que se fuera a realizar en el Cañón del Colorado, o en pleno alto del Monte Everest, y no me refiero a otros relieves de nuestro Planeta, porque allí, el ser humano ya hizo muchos años atrás este tipo de infraestructuras, y no digamos en plena Península Ibérica cuando se tiene que traspasar la Meseta para dirigirse al Norte Español.
Ya lo advertíamos desde INDEPENDIENTES POR CUENCA, que mala herencia nos dejaba Bono cuando en el debate autonómico sobre el estado de la "región", anunció la Autovía Guadalajara-Tarancón, que va a baypasear la capital de España, de manera que el mayor caudal de tráfico procedente del Norte hacia el Sur y Este de Epaña tendrá el camino despejado por esta nueva vía, que canalizará los flujos hacia el Sur-Este por Albacete, invalidando en parte la funcionalidad del proyecto de Autovía por Teruel y por Cuenca.
Ahora el secretario de organización Psoe de Cuenca y futuro candidato al Congreso de los Diputados, echa la culpa a los valencianos, y dice que los suyos han hecho ya los deberes, lo que es falso; pero el caso es que hace tan solo unos meses, este verano, tanto él como el senador Luis Ayllón, se expresaban como si se hubieran empollado de memoria los viejos discursos de su compañero de partido, el ya Expresidente del Parlamento Europeo y antaño Ministro de Obras Públicas del Gobierno de Felipe González, "Sr." Borrell, cuando después de haber fusilado de sopetón la opción de la añorada Autovía Madrid-Valencia por Cuenca, por la que se había decantado su antecesor en esa cartera y nunca bien reconocido por nuestras tierras, Ministro Javier Luis Saenz de Cosculluela, replicó al Diputado del PP por nuestra provincia, José Madero, que aun con tono de acobardamiento había osado a leer una pregunta en el Congreso de los Diputados sobre esta cuestión.
Tanto Sahuquillo como Ayllón, este verano nos decían que la declaración de impacto ambiental, que lleva en un cajón del Ministerio de Medio Ambiente desde Abril del año 2003, seguirá allí por tiempo indefinido, porque los inmensos bosques y dificultades orográficas, hacen prever una enormidad de problemas y trabas de complicada solución. Y eso lo dijeron tal cual, por mucho que ahora manifieste que el consejero de Medio Ambiente y Desarrollo Rural, José Luis Martínez Guijarro, con sus técnicos y con los del Ministerio de Fomento, se pateó en la provincia de Cuenca los posibles tramos por los que podía ir la autovía para desbloquear los problemas medioambientales que existen, no me los invento». Y por mucho que en este momento diga que la evaluación de impacto medioambiental de la zona de la provincia de Cuenca ya está hecha.
No sé por qué se empeñan en mentir una y otra vez con tanto desparpajo, si para pillarlos basta con tener un poco de memoria; o, si no se tiene, simplemente tirar de hemeroteca.
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